Una Fiscalía Federal en Asunción (Paraguay) investiga si las divisas generadas por la firma fueron desviadas hacia paraísos fiscales para ocultar patrimonio. Concurso y cesión de acciones.
Vicentín Paraguay exportó alrededor de 1.000 millones de dólares en sólo un lustro. Es un promedio que surge del dato de 2019 de la firma en el país vecino: casi 200 millones de dólares de facturación en un país donde la firma argentina sólo tenía una oficina, seis empleados y un mundo enorme de relaciones que le permitieron evadir impuestos argentinos. El dato es muy revelador, si se tiene en cuenta que en sólo esta unidad de negocios se movió, como calculan un grupo de acreedores del grupo, una cifra muy parecida al rojo de la firma, cercano a los 1.340 millones de dólares.
Como reflejó Zona Critica TV hace dos semanas, un grupo de acreedores del grupo denunciaron a la firma nacida en Avellaneda por presunto lavado de dinero. Desde la firma de abogados Moyano y Asociados, que patrocina a los acreedores, tienen una sospecha bastante investigada: el dinero de Vicentín Paraguay que salió como exportación de granos se efectivizó con la delegación guaraní en su rol de broker y no de productores tradicionales. Para eso se valieron de sociedades uruguayas y panameñas con directivos coincidentes, que al mismo tiempo están procesados en Argentina en la causa denominada “La ruta del dinero K”, como se explicó en notas anteriores.
En Paraguay, Vicentín se constituyó en Asunción, con activos desconocidos y con sus caras visibles como directivos: Gustavo Nardelli y Alberto Padoán ( en la foto, cuando era el hombre fuerte de la Bolsa de Comercio de Rosario) . A partir de testigos se logró establecer que esta empresa funcionaba como corretaje agropecuario (broker).
Vicentín Paraguay es accionista y controlante de Renova S.A, en asociación de Oleaginosa Moreno e Hijos SA, cuyo controlante es Glencore Finance Bermudaz Inc. de la jurisdicción de Bermudas. Según informara Glencore, y la propia Vicentin S.A, el 2 de Diciembre de 2019, Vicentin S.A – en realidad Vicentín Paraguay S.A – vendió el porcentaje de 16,67% de sus acciones a Oleaginosas Moreno e Hijos ( Glencore). Se desconoce, al menos por ahora, la existencia final de esa transacción y el lugar en la que se realizó, pero no fue en jurisdicción paraguaya. Glencore es vista por muchos economistas en el mundo como la multinacional que crea sociedades para sortear el pago de impuestos, de mínima, y liquidar empresas en países emergentes, de máxima.
Vicentín se encuentra técnicamente en cesación de pagos, desde el 4 de diciembre pasado, con un concurso preventivo abierto en la justicia civil y comercial de Reconquista, en donde ya se han presentado más de 2000 acreedores. Antes de ingresar al “pagadios” Vicentín cedió para pagar deudas comerciales un tercio de su participación en Renova S.A al grupo Glencore, el cual pasó a tomar el control total de la empresa al adjudicarse el 67 % de las acciones, perdiendo Vicentin el control de la empresa estratégica.
Antecedentes de “pagadios”
Vicentín, que obtuvo un crédito de 18 mil millones de pesos del Banco Nación el año pasado – es material de una investigación penal en Capital Federal- tuvo en 2015 las cuentas embargadas por un juicio perdido con una entidad financiera que auxilió al grupo, de acuerdo a lo que surge en la causa IJG TOF B.V c/ Algodonera Avellaneda, que se tramitó ente el Juzgado Nacional en lo Comercial 31. La entidad financiera inicio acciones a Vicentín, seguramente, por el incumplimiento de la firma. La empresa liderada por Padoán perdió el juicio y la justicia embargó las cuentas de la empresa del Banco Nación, sucursal Avellandea. Entre las sociedades demandadas se menciona a Nacadie Comercial S.A Uruguay, de acuerdo a un informe confidencial que llegara la semana pasada a uno de los miembros de la Comisión de Seguimiento del caso Vicentín en la Legislatura santafesina. “IJG TOF B.V es, a su vez, controlada por un Fondo de Inversion extranjero que auxilia financieramente a empresas de economías emergentes. Este Fondo denominado TriILinc Global Impact Fund LLC, está bajo el regimen de oferta publica en los Estados Unidos. A tal respecto, presentó informes a la Comisión Nacional de Valores de dicha jurisdiccion (Securities and Exchange Commission), y allí informa que auxilio financieramente a sociedades del Grupo Vicentin ( Vicentin Sociedad Anónima, Algodonera Avellaneda Sociedad Anónima, Friarsa) y que las garantías de dichos prestamos fueron otorgados por Nacadie Sociedad Anónima de Uruguay”, que es un satellite del grupo Vicentín, se señala en ese informe.
La Conexión Uruguay – Panamá
En Uruguay, Vicentin controla Nacadie Comercial S.A, enclavada en la zona franca de Montevideo. El apoderado es Patricio Coghlan, un contador con domicilio en ciudad de Buenos Aires. Coghlan es , a su vez, director junto a Máximo Padoan, Gustavo Nardelli y Pablo Estrada de ENAV S.A, radicada en Mendoza, identificada como una de las empresas del Grupo. El mismo Coghlan, además, en representación de Nacadie Comercial S.A, de Uruguay, constituyó una sociedad denominada Nacadie Comercial Sociedad Anónima en Argentina el día 9 de Septiembre de 2019, fijando domicilio en Boulevard Hipólito Irigoyen 298, Reconquista, Provincia de Santa Fe, que seria el mismo de FRIAR SA. perteneciente al Grupo Vicentin. El 1 de Julio de 2005 se creó en Panamá la sociedad Nacadie Comercial S.A (Panamá), cuyos directores, como se informara en notas anteriores, son dos abogados panameños: Asterio Caballero Ibarra y Oriel Francisco Kennión. Ambos están bajo investiagción en la justicia argentina por presunto lavado de dinero, incluso Kennión supo estar bajo la lupa de la DEA por crear sociedades para lavar el dinero sucio del tráfico de estupefacientes.
De acuerdo a informes financieros de Inteligencia Competitiva de Uruguay, surge un importante movimiento de divisas entre Nacadie de Uruguay y la jurisdicción panameña. En ese país de centroamércia, único por lograr la unión de los dos océanos a mitad de continente, opera Nacadie Overseas Inc, que se presume opera con Vicentín.
Una interesante duda se plantea desde el estudio jurídico encabezado por Mariano Moyano – que es experto en estos delitos y trabaja con sedes en Miami, por ejemplo – . De los informes vertidos por el Grupo Vicentin –señalan – a la Bolsa de Cereales de Rosario, al Tribunal Arbitral de dicha entidad, por ante el Juzgado Comercial interviniente en el Concurso Preventivo de Vicentin SA., de informaciones vertidas a los inversores en los diversos fideicomisos emitidos, y por último, ante la información corporativa vertida en su pagina Web, nunca fue admitida como perteneciente al Grupo Económico la Sociedad Nacadie Sociedad Anónima, ni en Panamá, ni en Argentina y tampoco en Uruguay.
Autor: Héctor M. Galiano