Deberá pagar una multa de $830 mil pesos. Se le impusieron dos años de prisión, que fueron unificados con otra pena anterior, por lo que deberá cumplir un total de cinco años y seis meses de prisión. El fiscal Ezequiel Hernández estuvo a cargo de la investigación.
Un policía de 44 años identificado como Oscar Adrián Celer fue condenado a dos años de prisión de cumplimiento efectivo por enriquecimiento ilícito. Sin embargo, deberá cumplir un total de cinco años y seis meses de prisión a raíz de que la pena fue unificada con otra anterior (ver “La otra condena”).
La condena a Celer fue impuesta por la jueza Susana Luna en el marco de un juicio en el que se abreviaron los procedimientos que se desarrolló en los tribunales de la ciudad de Santa Fe.
El fiscal Ezequiel Hernández estuvo a cargo de la investigación. Según informó, “además del cumlimiento efectivo de prisión, Celer fue inhabitado de por vida para ejercer cargos públicos y deberá abonar 830.268 pesos al MPA en concepto de multa”. El fiscal aclaró que “la suma de dinero equivale al 50 por ciento del incremento patrimonial que el uniformado admitió que no estaba en condiciones de justificar”.
Hernández detalló que “parte de la multa será pagada con una lancha marca Delfín que era propiedad del condenado y que fue secuestrada oportunamente; un automóvil marca BMW que fue rematado por la Agencia Provincial de Registro, Administración y Destino de Bienes y Derechos Patrimoniales (APRAD); y uno marca Volkswagen modelo Gol que tendrá el mismo fin”. Agregó que “el saldo restante de la multa serán 80.734,52 pesos que deberá pagar en efectivo”.
Entre 2013 y 2017
Hernández indicó que “Celer llevó a cabo su accionar delictivo mientras trabajaba como agente de la policía santafesina”. Mencionó que “a principios de 2019, el área de Asuntos Internos de la secretaría de Control provincial le solicitó la justificación de un desmedido incremento patrimonial que tuvo entre 2013 y 2017 y había sido advertido a raíz de una denuncia anónima”.
“Por su condición de funcionario público, el condenado estaba obligado a brindar información sobre el origen de sus ingresos económicos”, sostuvo el fiscal. En tal sentido, subrayó que “el hombre el 44 años no pudo explicar de dónde había obtenido el dinero para adquirir un inmueble ubicado en Sauce Viejo, tres autos, dos camionetas, dos embarcaciones, un cuatriciclo y una motocicleta”.
“A partir de informes de entidades públicas y privadas y de allanamientos realizados en propiedades de Celer, se determinó que, en total, el monto de dinero no justificado era de 1.660.536 pesos”, aseguró el funcionario del MPA. “En diferentes etapas de la investigación, tres contadores emitieron dictámenes distintos que coinciden en que hubo enriquecimiento ilícito”, añadió.
Responsabilidad penal
“Dada la voluminosa y concordante prueba en su contra, Celer reconoció su responsabilidad penal por el delito que le endilgamos desde la Fiscalía”, destacó Hernández. “La magistrada, por su parte, consideró que el ilícito contra la administración pública fue cometido tal como lo atribuimos”, afirmó.
Además, “la Defensa del policía aceptó la calificación penal de lo ocurrido, la pena que propusimos y el procedimiento abreviado elegido para llevar adelante el juicio”, concluyó el fiscal.
La otra condena
En noviembre de 2017, Celer quedó en prisión preventiva en el marco de la investigación –que también encabezó el fiscal Ezequiel Hernández– por la cual fue condenado en mayo de 2019. Esa condena se le impuso a él y a otros tres policías (Cristian Basilio Gutiérrez; Exequiel Sebastián Romero y Leonardo Abel Velázquez).
“En aquella oportunidad, fue condenado por la coautoría de los delitos de tentativa de robo calificado (por ser en poblado y en banda; por el uso de arma de fuego; y por ser miembros de una fuerza de seguridad)”, precisó el funcionario del MPA. Además, concluyó que “Celer y Gutiérrez también fueron condenados como autores del delito de portación ilegítima de arma de fuego de guerra”.