Los cinco detenidos el viernes pasado se negaron a declarar. Dos de ellos son los cabecillas. En la última maniobra narco intentaron mover entre 5 y 10 millones de dólares. Autos, casas, campos, motos, camiones, tractores y hasta una embarcación en el inventario de la banda, que además enfrenta acusaciones por lavado de dinero.
Gustavo Daniel Nuñez y Sebastián Osvaldo Romera siguen desconcertados. Tomaban todas las medidas a la hora de mover la droga. “Se perseguían” con cada movimiento raro o un rostro desconocido. El viernes quedaron detenidos por orden de la justicia federal santafesina. Los policías federales dirigidos por el fiscal Walter Rodríguez se movieron cautelosos y en más de una ocasión también ellos llegaron tarde a un lugar clave o fueron víctimas de una maniobra distractora. Pero el viernes por fin pudieron cerrar una investigación muy larga con el secuestro de 369 panes de cocaína que pesaron casi 392 kilos.
Los cabecillas,, además de Jorgelina Verónica Galligani, María José Núñez y Matías Ezequiel Tomei, fueron acusados en las últimas horas de “haber tenido poder de disposición de manera conjunta y organizada sobre la cantidad de 369 panes de cocaína que se encontraron almacenados en el interior del vehículo marca BMW modelo X5 dominio GTE072 ( en la foto) hallado en una cochera ubicada en la calle Garay a la altura catastral 2100 de Villa Gobernador Gálvez”.
El fiscal Rodríguez, como había adelantado en los dictámenes anteriores, también les imputó a Nuñez, Romera y Galligani “haber puesto en circulación activos provenientes del comercio ilícito de estupefacientes, que ellos mismos perpetraron, con la posible consecuencia de que estos adquieran apariencia lícita, en el período que transcurre desde el mes de octubre de 2017 hasta la actualidad (…) esta conducta tuvo lugar a partir de la conversión, venta y disimulación de operaciones comerciales relativas a automotores, una embarcación e inmuebles, reflejadas en negocios jurídicos que por su envergadura y espacio temporal durante el cual se extendieron”.
El fiscal ubica el comienzo del blanqueo en 2017 en virtud de destacar un procedimiento que hizo en octubre de ese año la Gendarmería Nacional en donde se secuestraron casi 25 kilos de cocaína de un camión de la firma rosarina Flecha Log S.A. En la investigación llevada adelante por la Fiscalía se estableció que el propio Nuñez realizó cruces fronterizos en el mes de enero de 2019 a nombre de un vehículo que se encuentra registrado a nombre de la misma empresa, A su vez, el auto con el cual Núñez atravesó las fronteras argentinas es el mismo que fue visto por personal de Gendarmería en septiembre de 2019 cuando divisó en un campo de la localidad de Larrechea una avioneta camuflada con bidones de combustibles alrededor.
De acuerdo al relevamiento de bienes de los integrantes de la banda se puso establecer que Romera adquirió 12 vehículos en el tiempo investigado, además de una lancha y un inmueble en General Lagos. A Jorgelina Galligani le detectaron compras injustificables de 5 autos y un tractor. Los bienes adquiridos por Gustavo Núñez fueron 18 autos y una moto, además de una casa en Villa Gobernador Gálvez y otra en Alvear, que se encuentra en construcción.
Autor: H.M.G