«A lo único que contribuye es que se empujen ciertos límites que es bueno mantener», sostuvo; negó un distanciamiento con Duhalde
El exministro de Economía Roberto Lavagna descartó por el momento un eventual diálogo con la expresidenta Cristina Kirchner y negó que haya tenido diferencias con Eduardo Duhalde sobre un eventual acercamiento a la líder de Unidad Ciudadana.
En una entrevista que concedió a Radio La Red, el economista dijo que definirá si es o no postulante a presidente en junio, cuando cierre el plazo legal para la inscripción de candidaturas. Además, insistió en que está trabajando con distintos sectores para «generar consensos básicos».
Cuando le preguntaron si conversaría con Cristina Kirchner , el exfuncionario respondió: «Uno tiene que estar dispuesto a conversar con cualquiera si cree que esto puede contribuir en algo. En este en este momento le diría que no porque a lo único que contribuye es que se empujen ciertos límites que es bueno mantener».
«La situación del país es muy complicada, de esta situación no se sale con candidaturas mágicas, se sale juntando varias voluntades que incluyan a la sociedad civil», aseguró Lavagna.
El exfuncionario habló también de las cifras de pobreza que difundió la Universidad Católica Argentina en las últimas horas e indicó que «la economía argentina está estancada hace ocho años y cayendo en los últimos meses».
«Los sectores medios están sintiendo el golpe, asumiendo una serie de reducciones del nivel de vida importante y cuando los hechos se acumulan a lo largo de los años, los efectos no pueden ser otros», argumentó.
Sobre el plan económico del gobierno evaluó: «Siempre creí que era un plan errado, se llegó a una situación en la cual los mercados registraron una fuga hacia el dólar importante, y en ese momento el gobierno se quedó sin otra respuesta que ir al Fondo, y el Fondo le ha formulado un plan de ajuste».
El «jueguito de la tasa»
En ese marco, Lavagna resaltó que «puede haber una ligera baja» a futuro de la inflación respecto de los últimos «dos o tres índices, pero no se puede hablar de un control de la inflación». «Este jueguito de la tasa y el dólar termina mal», advirtió.