Después de 16 años de trámite en la justicia, la denominada «Causa Inundaciones de 2003» tuvo un fallo. El juez Luis Actavio Silva condenó por estrago culposo a los ex funcionarios de Carlos Reutemann: Ricardo Fratti y Edgardo Berli, el primero era Director de Obras Hidráulicas de la provincia, el segundo el ministro de Obras Públicas, quien llegó a jubilarse con un cargo de jerarquía en febrero de 2018. Fratti, en cambio, fue la cabeza que hizo rodar el Lole por decreto en los primeros días de mayo de 2003.
Silva trabajó durante un año y medio un fallo de 150 páginas en el que condena a los imputados a tres años de prisión en suspenso y hace lugar parcialmente a la demanda civil de la actora en contra de los imputados sumado a la provincia de Santa Fe, subsidiariamente.
La inundación, resume el juez, fue producto de un fenómeno climático excepcional sumado a una serie de desatenciones y obligaciones de los imputados en su rol de funcionarios públicos y en cumplimiento de las leyes vigentes, desde el impedimento del ingreso del agua hasta la evacuación y la contingencia.
El ingreso del río Salado por el oeste de la ciudad causó la muere directa de 23 personas y unas 100 más fallecieron por secuelas del evento hídrico.
La Fiscalía había pedido una pena de 5 años para los imputados. Con esta pena ninguno de los acusados perderá la libertad. Aunque el mote de inundador nadie se los podrá sacar.