Así lo estableció el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Santa Fe este mediodía. Fueron encontrados culpables de engañar y trasladar con fines de explotación laboral a cuatro víctimas en situación de vulnerabilidad, dos de ellas menores de edad, en un campo ubicado en la localidad santafesina de Los Zapallos. Una vez allí fueron sometidos a condiciones inhumanas.
Esta tarde, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Santa Fe condenó a dos agricultores a diez años de prisión por el delito trata de personas. Para esto, en línea con lo alegado por el fiscal General Martin Suárez Faisal, los encontró culpables de engañar y trasladar, con fines de explotación laboral, a cuatro víctimas en situación de vulnerabilidad, dos de ellas menores de edad, en un campo ubicado en la localidad santafesina de Los Zapallos. Además, los jueces ordenaron el decomiso de una importante suma de dinero y de dos camionetas Hilux.
A lo largo del debate oral, que comenzó el lunes 15 de febrero, quedó demostrado que los imputados engañaron a través de falsas ofertas de trabajo a dos víctimas, oriundas de la República Plurinacional de Bolivia, entre enero y febrero de 2014. El 3 de junio de ese año, se allanó el campo, logrando rescatar a otras dos víctimas, una de ellas también de la República Plurinacional de Bolivia y la otra de la provincia de Salta. Ambos fueron explotadas en el campo denunciado.
De esta manera, a partir de la declaración de las víctimas, se pudo constatar que fueron obligadas a trabajar en condiciones indignas, sin medidas de higiene y seguridad adecuadas y en un marco de informalidad laboral, sin efectivizar los sueldos y descansos correspondientes. Además, dormían en el mismo lugar, tenían prohibido salir del predio, padecían malos tratos y estaban expuestos a factores graves y perjudiciales para la salud.
La instrucción del caso estuvo a cargo del fiscal federal Walter Rodríguez, quien el 30 de diciembre de 2014 solicitó la elevación a juicio. Ya en la etapa del juicio oral, el fiscal Suárez Faisal solicitó la pena de diez años de prisión para cada uno de los imputados tanto por el delito de trata de personas así como también por haber facilitado el cruce ilegal de tres de las víctimas. Además, el representante del Ministerio Público Fiscal solicitó el decomiso de las camionetas marca Toyota, del dinero en efectivo, maquinarias y demás efectos secuestrados.
El caso
La investigación se inició el 7 de febrero de 2014 cuando personal policial halló a dos menores de nacionalidad boliviana caminando por la calle en la localidad de Santa Rosa de Calchines, provincia de Santa Fe, indocumentados, sin dinero y pidiendo agua y comida. A partir de ese momento, se pudo establecer que las dos víctimas habían escapado del campo de los imputados con la intención de viajar a la provincia de Jujuy en busca de un familiar y así regresar a Bolivia.
A partir de sus declaraciones, se pudo establecer que ambos habían sido engañados por los imputados a través de una falsa oferta laboral en Argentina. En virtud de ello, la Dirección Especial de Prevención y Sanción del Delito de Trata de Personas, a solicitud del Ministerio Público Fiscal, inició las investigaciones en el campo que concluyeron con el allanamiento realizado el 3 de junio de 2014, en el que además participó personal del Registro Nacional de Trabajadores y Empleadores Agrarios (RENATEA).
Tras la medida, se pudo identificar a las otras dos víctimas de esta causa además de constatar las condiciones inhumanas en las que se encontraban los trabajadores. Vivían en construcciones de nailon, hacinados, sin gas, agua potable ni baños, sumado a que dormían sobre cajones de manzanas con colchones en mal estado. Asimismo, no contaban con las medidas de seguridad adecuadas y estaban en un marco de informalidad laboral, sin efectivizar los sueldos ni con los descansos correspondientes. También precisaron que eran víctimas de malos tratos.
En cuanto al pago, una de las víctimas declaró que solo le entregaban algunos adelantos para gastos personales, ya que uno de los imputados le retenía todo su sueldo. A su vez, indicó que el acusado le retenía su documento nacional de identidad bajo llave.
Asimismo, se procedió al secuestro distintas herramientas, maquinarias y dos camionetas Toyota Hilux. Finalmente, desde un ropero con candado en el dormitorio de uno de los imputados se secuestraron $21.900 en efectivo y un arma de fuego.
Fuente: Fiscales.gob.ar