La medida fue dispuesta por la justicia federal, mientras avanza la investigación para determinar si los empresarios cometieron delitos contemplados en la ley de residuos peligrosos. Las familias que habitan el lugar serán desalojadas y reubicadas.
La justicia federal ordenó la «inmediata clausura preventiva» del predio de la ciudad de Ceres en donde se habrían intoxicado con plomo varios chicos. Además, dispuso que el lugar sea evacuado y que la Gendarmería Nacional se encargue de custodiar las deterioradas instalaciones. Finalmente, le requirió al municipio local que «arbitre los medios necesarios para la inmediata relocalización de las personas que aún habitan» allí. La resolución fue firmada por la magistrada subrogante rafaelina Sylvia Raquel Aramberri, quien de esta manera hizo lugar a lo solicitado por el fiscal federal Jorge Gustavo Onel , también subrogante en la cabecera departamental de Castellanos.
El funcionario del Ministerio Público Fiscal comenzó la investigación el pasado 26 de enero, a raíz de distintas denuncias periodísticas que mencionaban que se habían intoxicado con plomo algunos niños que vivían en el abandonado predio, donde hasta 2017 funcionó una fábrica de baterías conocida como Cerplac, que habría pertenecido a la firma Nesaglo SA. El lugar se ubica en inmediaciones de la esquina que forman las calles Tucumán y Larrea, en barrio Las Américas.
La contaminación con plomo habría provocado el fallecimiento de Xiomara Crespín. La pequeña tenía 2 años. A principio de año presentó un cuadro grave de salud y le diagnosticaron muerte cerebral. Fue trasladada de urgencia al Hospital de Niños Orlando Alassia, donde finalmente falleció el 6 de enero. La justicia provincial inició una investigación y estudios practicados al cadáver arrojaron que la sangre de la víctima estaba severamente intoxicada con el mencionado metal. Luego, se supo que otros tres niños del mismo entorno familiar presentaron cuadros similares, aunque no tan graves e inmediatamente fueron derivados al mencionado centro público de salud especializado en menores de edad que hay en la capital provincial.
El fiscal intenta determinar, entre otras cosas, si las autoridades de la firma que es propietaria cometió delitos previstos en la ley de residuos peligrosos.
Agujeros
En su solicitud, el funcionario indicó que la licenciada Dianela Bertorello, coordinadora de Medio Ambiente del municipio ceresino, informó en el lugar «existen algunos restos de materiales e insumos utilizados en la fábrica que podrían eventualmente producir, sumado a otros factores, inconvenientes en la salud de los residentes».
Bertorello también refirió que «en su oportunidad se advirtió la existencia en la parte de atrás, de agujeros tipo pozos que contienen líquido en su interior que parecía que eran restos de combustible, como así también se advirtió allí la presencia de restos de batería. También en el fondo hay una piecita que contiene en el suelo una capa con resto de algo que a simple vista no es posible saber de qué se trataría, ya que hace muchos años que el lugar se encuentra abandonado. Según su apreciación estarían contaminados tanto el suelo como el agua, ello debido a la misma corrosión climática que va absorbiendo los componentes, razón por la que se solicitó la realización de un estudio sobre el suelo y el agua para corroborar la existencia de plomo allí. Por último, agrega que dicho lugar no es habitable, y menos aún para niños, que tiene paredes y techos derrumbados».
ESTUDIOS
El municipio de Ceres emitió un decreto el 25 de enero en el que declaró al inmueble en cuestión como «zona no apta para ser habitada, por considerarse de riesgo ambiental y peligro sanitario». Por otro lado, el funcionario Oreste Blangini, del Ministerio de Medio Ambiente provincial, informó que se recogieron muestras de varios elementos (residuos, etc.), y que aproximadamente en 15 días se contaría con los resultados de los informes ambientales llevados a cabo.
INTOXICACIÓN CON PLOMO
El fiscal Onel citó en su resolución al sitio web Mayo Clinic: «La intoxicación por plomo ocurre cuando el plomo se acumula en el organismo, a menudo, durante meses o años. Incluso las cantidades pequeñas de plomo pueden provocar problemas de salud graves. Los niños menores de 6 años son especialmente vulnerables a la intoxicación por plomo, que puede afectar gravemente el desarrollo físico y mental. En niveles muy altos, la intoxicación por plomo puede ser mortal… Los signos y síntomas del envenenamiento por plomo en los niños incluyen los siguientes: retraso en el desarrollo, dificultades de aprendizaje, irritabilidad, pérdida del apetito, pérdida de peso, pereza y fatiga, dolor abdominal, vómitos, estreñimiento, pérdida auditiva, convulsiones».
Fuente: El Litoral.