Trump refuerza así sus críticas a la primera economía europea por no dedicar lo suficiente a su gasto militar nacional, el principal punto de desencuentro entre Estados Unidos y sus 28 aliados en la cumbre
Estados Unidos, cuyo presupuesto militar alcanza el 3,5% del PBI y cuyas contribuciones directas al presupuesto de la OTAN representan el 22% del total, criticó en el pasado el recorte en defensa que sus aliados hicieron en plena crisis económica.
En Gales, en 2014, los miembros de la alianza se comprometieron a aproximar su gasto militar al 2% del PBI nacional para 2024, pero junto a Washington sólo siete países europeos lo cumplirían en 2018.
Ayer, la Unión Europea urgió a Trump, por boca del presidente del Consejo Europeo Donald Tusk, a «apreciar» a sus aliados y a recordar en su cumbre con Putin «quién es su enemigo estratégico» y «quién es su problema estratégico».