Patricio Serjal, denunciado por un capitalista del juego legal y también clandestino, de ser parte de una red de protección que pasaba información a una banda ligada a Los Monos, renunció este sábado. Perotti decide si la acepta.
El jefe de los fiscales de Rosario presentó este sábado su renuncia ante el Fiscal General Jorge Baclini. En la misiva de una carilla que firma al pie señala que es ajeno a todas las circunstancias que se ventilaron en las últimas horas, pero quiere ponerse a disposición de los investigadores. «Ha sido un honor haber desempeñado el cargo de fiscal», remata.
Tal como se ha comentado en Zona Crítica en crónicas anteriores, el fiscal quedó comprometido por los dichos del un capo del juego ilegal en el sur santafesino llamado Leonardo Peiti, quien lo acusó de ser un eslabón en la cadena de protección aportando información sensible desde adentro del MPA a cambio de dinero, concretamente, dólares.
En ese grupo de funcionarios infieles, según Peiti, tenían un rol protagónico el fiscal de grado Gustavo Ponce Asahad, quien según el imputado -que declaró bajo la figura de arrepentido- recibía todos los meses dólares a cambio de información sensible.
La carta completa de la renuncia: