Se decidió en conjunto entre la provincia, el municipio, los gremios UPCN, ATE y Siprus “para proteger el patrimonio del Estado”, ante robos y destrozos.
Según se anunció oficialmente, “autoridades del Ministerio de Salud dieron el primer paso para la instalación de alarmas en los centros de salud de la ciudad de Santa Fe, con integrantes de la Municipalidad y de los gremios de UPCN, ATE y Siprus”. Con relación a la medida, el comunicado explica: “Tiene por objetivo reforzar la vigilancia en los efectores y fue analizada en un encuentro desarrollado en la sede de la Región de Salud – Nodo Santa Fe, que fue encabezado por los coordinadores Francisco Sánchez Guerra y Leonardo Martínez; y la facilitadora y mediadora Nilda Santoro Hernández”. Y agrega: “Surge de un trabajo conjunto con los gremios debido a que, en muchas oportunidades, ocurren hechos delictivos cuando los centros de salud están cerrados”. “Además –prosigue– se estableció que en las próximas reuniones se evaluarán los lugares prioritarios para comenzar con el funcionamiento de este sistema, y por último se firmarán los acuerdos necesarios para su instalación”. Por su parte, Leonardo Martínez aseguró: “Desde el Ministerio de Salud se tomó la definición política de proteger el patrimonio que es del Estado y por supuesto la integridad física de los trabajadores”. Y explicitó: “En caso de avanzar con los acuerdos, la medida consistiría en colocar alarmas que serán monitoreadas por la Municipalidad de Santa Fe en cada uno de los centros de salud. Estos dispositivos están conectados a la Central de Monitoreo de la Municipalidad y dan el alerta al 911”. Asimismo, el coordinador indicó que “se convino en continuar con una nueva reunión el próximo viernes 30 para definir cuántos y cuáles son los centros de salud por los que se comenzaría a implementar este sistema de manera progresiva. Es una decisión que se va a tomar de manera conjunta con los gremios, los coordinadores de subregión y el resto de los actores que venimos trabajando”. Más seguridad “Queremos darle un marco de seguridad a los centros de salud, ya que los últimos episodios que registramos no se produjo, afortunadamente, agresión a los trabajadores sino hechos delictivos en los que tienen como consecuencia la ruptura de aberturas para producir el robo de computadoras y equipamiento de atención. Reponer estos elementos de trabajo llevan su tiempo”, manifestó Martínez en el comunicado. Finalmente, y según el comunicado, “los representantes del ministerio manifestaron que fue un encuentro muy positivo, en el cual se explicó el sistema a implementar y todos pudieron realizar sus aportes”. Definirán acciones en Rosario El ministro de Salud, Mario Drisun, participará este lunes y martes de dos encuentros para reflexionar y pensar acciones a los fines de reducir la conflictividad y la violencia institucional en los hospitales Provincial de Rosario y Eva Perón de Granadero Baigorria. En la oportunidad, el funcionario provincial contará con el asesoramiento de los experto en la materia Alejandro Nató y Nilda Santoro de Hernández. En las reuniones llevadas a cabo anteriormente en hospitales del Nodo de Salud Región Santa Fe y Rosario, los asistentes pudieron expresar sus inquietudes y exponer situaciones puntuales y generales como balance de las diferentes causas de violencia. En esa ocasión, Drisun destacó la significación de la jornada, cuyo abordaje “decidimos afrontar con mayor firmeza porque es un tema que nos preocupa y ocupa tanto al gobierno provincial como al Ministerio de Salud, como es la convivencia social y la violencia en los distintos aspectos”. Por su parte, el especialista en mediación y resolución de conflictos, Nató, explico que se trata de “un diagnóstico de situación, un espacio de diálogo donde surja cuál es la realidad en cada uno de los lugares”. También apuntó que “la problemática existente con la presencia de las violencias en diferentes ámbitos del espacio social urbano, se traslada a todas las órbitas. Hay que tener en cuenta que en este contexto los hospitales públicos y los centros de atención primaria de la salud son espacios que están abiertos los 365 días del año las 24 horas”. Asimismo, reconoció que “lógicamente lo que acontece en la ciudad también ocurre en los centros de salud. El tema es que, en estos lugares de trabajo, el clima tiene que ver con la situación en sí y la posibilidad de evitar que esto acontezca; hay que minimizar los riesgos para el trabajador y al mismo tiempo buscar las mejores soluciones para cada una de las situaciones”. Alejandro Nató es abogado y mediador, especialista en conflictos públicos. Tiene una maestría en Programación Neurolingüística y en Resolución de Conflictos y Mediación. Es profesor titular de la cátedra de Derecho Latinoamericano de la UBA, de la Universidad Complutense de Madrid y de la Universidad de Barcelona, entre otras. El Cullen a la espera Quizás el hecho de violencia que más marcó a los trabajadores de la Guardia del hospital Cullen haya sido el que ocurrió en abril de 2011, cuando ingresó un joven con heridas de bala en las piernas. Una pelea entre parientes y allegados a ella, se trasladó al interior de la guardia, al quirófano y a la terapia.
En ese momento, siendo Francisco Sánchez Guerra director del hospital dijo: “Hechos de violencia dentro de la Guardia ocurren todos los días y estamos trabajando en evitarlos”. Y agregó que era necesario más personal policial: “Si se ponen 20 policías para la venta de entradas de un partido de fútbol, se podrían mandar más patrulleros y presencia policial al hospital”. Dos años después, un joven fue baleado dentro del hospital e intervino UPCN. El gremio se reunió con autoridades y acordaron: “Durante todo el día se realizarán rondas policiales cada dos horas. upervisados y reforzados por el personal de vigilancia propio del hospital, en el horario de visita (14.30 a 16.30) se realizará un estricto control de ingreso al hospital, con personal policial destinado a tal fin. Finalizado el horario de visita, se permitirá únicamente la presencia de un acompañante por paciente, sin excepción”, expresó en ese momento UPCN en un comunicado. Y agregó: “Asimismo, el director del hospital Cullen se comprometió a elevar el pedido para la instalación de cámaras de seguridad y detector de metales para el ingreso al nosocomio”. Lo concreto es que actualmente, si bien hay mayor presencia policial, no se cumplió con poner cámaras y detectores de metales, según se pudo comprobar en un recorrido por el hospital. También se acordó que haya un acceso exclusivo para profesionales y pacientes que llegan a la Guardia generalmente en camilla o en sillas de rueda, que sea independiente del acceso general de parientes y allegados a las personas que se atienden; para no entorpecer el trabajo de los profesionales y evitar las tensiones. Algunos trabajadores del hospital siguen esperando las medidas.