Implica la postergación de vencimientos impositivos hasta junio de 2017 y se detienen todos los juicios iniciados por Afip. Las medidas anunciadas por Buryaile fueron bien recibidas por productores y funcionarios provinciales.
“Es una situación preocupante”, dijo el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile antes de reunirse con productores de Gálvez. La declaración de emergencia y desastre solicitada días atrás por el gobierno provincial fue homologada por la Nación. De esta manera, se habilita una batería de medidas que apuntan a brindar beneficios a los productores afectados por las inundaciones. Será fundamental que los afectados obtengan el certificado de “emergencia” o “desastre” para contar con la asistencia.
Los beneficios implican la postergación por 90 días posteriores al vencimiento (31 de diciembre de 2016) de la emergencia decretada en la provincia (por lo que quienes sean declarados en “emergencia” tendrán prórroga hasta el 31 de marzo del 2017; y hasta el 30 de junio, en caso de “desastre”) de todos los vencimientos impositivos nacionales relacionados con ganancias, bienes personales, ganancia mínima presunta y los impuestos provinciales (por ejemplo el inmobiliario). Igualmente, aclararon que no estarán alcanzados por la medida el IVA, ni las cargas sociales.
