Los diputados de la provincia comenzarán hoy a tratar los proyectos que buscan incorporar al sistema de salud pública santafesino medicamentos a base de cannabis. En la reunión de la comisión de Salud se buscará consensuar las dos iniciativas presentadas en este sentido, una del bloque del Frente para la Victoria y otra del socialismo. De prosperar la propuesta, Santa Fe podría convertirse en la segunda provincia argentina en legalizar los tratamientos con cannabis y avalar la investigación científica de derivados de la marihuana.
Los primeros debates comenzarán hoy entre los diputados que integran la comisión de Salud. «La reunión está convocada a la mañana con la idea de empezar a tratar los proyectos», apuntó Joaquín Blanco, uno de los autores de la iniciativa que plantea, incluso, la producción pública de medicamentos a base de cannabis.
El tratamiento será seguido de cerca por numerosos grupos de padres de niños con epilepsias refractarias, trastornos neurológicos y otras enfermedades que llevan tiempo reclamando la sanción de una ley que ampare los tratamientos en base a cannabis. Bajo la consigna «El dolor no puede esperar», el grupo Macame (Mamás Cannabis Medicinal Santa Fe) puso en marcha una campaña para apoyar el pedido de las familias. En un día, al perfil de Facebook de la entidad llegaron más de 50 fotos con carteles que avalan el reclamo.
«Necesitamos que los proyectos sean tratados antes de fin de año», apuntó ayer una de las voceras del grupo, Laura Acosta. «Hay muchos chicos y mucha gente que sufre porque necesitan los tratamientos y no pueden seguir esperando», sostuvo y adelantó que referentes de distintas agrupaciones acompañarán el comienzo del debate, ya que confían que la norma no sólo allanará los trámites para importar el jarabe de cannabis, sino que permitirá también que personas sin obra social accedan a la terapia.
En octubre pasado, la Administración Nacional de Medicamentos (Anmat) autorizó por primera vez el ingreso al país de aceite de cannabis bajo el rubro «productos de uso compasivo». Actualmente hay más de cien personas con permiso para importar el fármaco, que se produce en Estados Unidos con la marca comercial de «Charlotte?s», en alusión a la nena estadounidense Charlotte Figi, la primera persona con derecho a utilizar cannabis con fines medicinales en el distrito de Colorado.
Sin embargo, según advierten organizaciones de familiares, como Mamá Cultiva, no todos los pacientes ni las patologías responden al tratamiento con este suplemento dietario. Por eso, exigen que se autorice el autocultivo de marihuana con fines medicinales y la investigación médica de otros principios activos del cannabis.
Las propuestas
En la Cámara baja se presentaron ya dos iniciativas para incorporar a la salud pública medicamentos a base de cannabis.
Leandro Busatto (Frente para la Victoria) impulsa un proyecto que prevé autorizar el uso de estos medicamentos «para el tratamiento del síndrome de Dravet y para toda otra patología que considere el Ministerio de Salud de la provincia. Además, extiende la cobertura de la obra social de los empleados públicos (Iapos) a estos tratamientos.
Desde el socialismo, Paco Garibaldi y Joaquín Blanco buscan no sólo garantizar el acceso a los tratamientos con cannabis en la salud pública, sino también el desarrollo de investigación y, finalmente, la producción pública de medicamentos a base de cannabis.
El ministro de Salud de la provincia, Miguel González, convocó a especialistas para reunir evidencia científica sobre los beneficios de los derivados del cannabis y acordar los protocolos que permitirán el tratamiento de pacientes con estos medicamentos.
En el Congreso
Además de las iniciativas desarrolladas en la provincia, en la Cámara de Diputados de la Nación se dio por primera vez un despacho de comisión a dos propuestas relacionadas con esta problemática. El proyecto de Cambiemos autoriza al Estado a que proporcione los aceites de cannabis a los pacientes con epilepsia refractaria, pero sin despenalizar el uso del monocultivo; mientras que la oposición proponía que se despenalizara el autocultivo de cannabis para el uso medicinal.
Hasta ahora, Chubut es la única provincia que sancionó una ley que incorporó el aceite de marihuana al vademécum de la obra social estatal para que pueda ser entregado en hospitales públicos.