Los hechos ocurrieron entre 2018 y 2019 en Unidad Militar de Anfibios de Santo Tomé. La víctima le reveló los hechos a dos especialistas militares en salud mental de Paraná, pero sin embargo fue dada de baja por una junta de militares, todos varones.
El juez federal Marcelo Bailaque citó a declaración indagatoria al capitán del Ejército L.D, quien fue denunciado por una cabo que fue su subalterna en la Unidad Militar de Ingenieros Anfibios de Santo Tomé entre los años 2018 y 2019 cuando el Capitán D. estuvo a cargo de la Intendencia de la dependencia estatal.
La mujer denunció que su superior la hostigó en un primer momento pero que luego ante a negativa de ella de relacionarse afectivamente empezó a perseguirla y a someterla a tratos degradantes e, incluso, a sancionarla.
La cabo, cuyo nombre se mantiene en reserva, narró que el Capitán tenía una especia de obsesión por ella y que frecuentemente la invitaba a salir, a tomar un café y que incluso opinaba como estaba vestida con frases o mensajes tales como “qué linda estas hoy” y menciones por el estilo. “Vamos a comer, no te preocupes que tu novio no se va a enterar”, le escribió el Capitán en alguna oportunidad por WhastApp, haciendo referencia a la pareja de la mujer que también estaba como dependiente del denunciado en la Unidad Militar.
La mujer entró en un estado de stress muy importante que le generó un cuadro de angustia y debió ser atendida por profesionales de la salud mental, una psiquiatra y una psicóloga, de la Unidad Militar de Paraná.
La Cabo relató su calvario vivido con el Capitán D. mientras fue subalterna de él y destacó que eso la había hecho perder peso, el pelo y le generaba insomnio. A pesar de la gravedad del caso, la joven denunciante tuvo que enfrentar una junta médica especial de militares en Capital Federal para evaluar su desempeño dentro de la Fuerza. En esa oportunidad, ocurrida en abril de 2019, todos los varones de la junta médica resolvieron declararla no apta para seguir en el Ejército y ordenaron darle de baja en diciembre de ese año. La decisión la adoptaron incluso con el relato de la mujer que en la junta médica denunció el acoso que había sufrido. Sin embargo, los integrantes de esa mesa examinadora consideraron que su desempeño errante no guardaba relación con los sucesos de abuso sufridos. Entre otras situaciones, la Cabo contó que una soldado a la que le decían “La Chamu” le aconsejó que tuvieran relaciones sexuales con el Capitán D., que “la iba a pasar bien y que iba a terminar con esa historia de maltrato”. Por hacer caso a sus valores y sus convicciones la mujer terminó en terapia médica y psicológica. Pero con su denuncia podría comenzar un camino de justicia y también de reparación.
H.M.G