Luego de que saliera a la luz la foto a través de la cual se conoció el festejo de cumpleaños de la primera dama en plena cuarentena, hoy aparecieron, en un medio kirchnerista, los videos del evento.
Luego del escándalo que estalló con la viralización de la foto del festejo de cumpleaños de Fabiola Yañez en la Quinta de Olivos cuando en el Área Metropolitana de Buenos Aires se encontraba en alerta epidemiológica y regía una estricta cuarentena, hoy aparecieron dos videos que coincidirían con la misma reunión ocurrida el 14 de julio del año pasado.
En el primero de los videos los invitados a la cena, todos ellos sin barbijo incluido Alberto Fernández, le cantan el feliz cumpleaños a la Primera Dama, quien al terminar la canción sopla una vela y luego agradece los aplausos y las muestras de afecto.
«¡Gracias!», exclama Yañez, agitando las manos en alto con una mueca de felicidad, aunque aclarando que no se pueden saludar con un abrazo a raíz de la pandemia. De fondo se escuchan los ladridos del perro presidencial, Dylan, quien da vueltas por el comedor mientras la decena de invitados celebran con copas de champagne. En el segundo video, la pareja del presidente sigue agradeciendo y choca su copa con la de los invitados, que se levantan de sus sillas para ir al encuentro de la agasajada. Mientras, Alberto Fernández observa la situación sentado en la mesa. Los videos se conocieron días después de que la periodista Guadalupe Vázquez difundiera la foto donde se ve a varias personas, entre ellos el presidente y Fabiola junto a una mesa en la Quinta de Olivos celebrando los 40 años de la pareja de Alberto. La TV Pública y El Destape fueron los medios oficialistas que se anticiparon a la oposición y al resto de los medios en la publicación de las imágenes. En el medio kirchnerista que publicó los videos, señalaron lo siguiente: “El Destape accedió al material en el que no se ve algo muy distinto a lo que revelaba la foto y que ya fue aclarado por el presidente, con pedidos de disculpas incluido”.
La polémica por la fiesta de cumpleaños en plena pandemia, contradiciendo el decreto presidencial que establecía estrictas normas de aislamiento social, preventivo y obligatorio, derivó en la indignación de la oposición que reaccionó con pedidos de juicio político y todo tipo de recriminaciones públicas. En una primera instancia, el presidente había desmentido la veracidad de las acusaciones pero cuando apareció una segunda foto, más contundente que la primera, no le quedó más remedio que admitir el hecho había sucedido y que había sido un «error».