El banco HSBC está armando las valijas para retirarse nada menos que de Brasil. La versión conocida ayer indica que las entidades locales Itaú Unibanco Holding y Bradesco y el español Santander Brasil habrían hecho una oferta en firme. Se calcula que la operación debería rondar entre los 3.100 y 4.300 millones de dólares, según fuentes consultadas por The Wall Street Journal. La información sobre la posible transacción se conoce poco antes de que el CEO global del HSBC, Stuart Gulliver, se apreste a anunciar un plan para reducir 20.000 puestos de trabajo alrededor del mundo.
Una venta de HSBC en Brasil –donde está siendo asesorado por Goldaman Sachs– necesariamente tendrá repercusión en la Argentina. La filial local está bajo la lupa de la AFIP y la UIF, que denunciaron al banco por más de 4.000 cuentas secretas descubiertas en Suiza.
Fuentes de la filial local dijeron de manera escueta y previsible: “No hacemos comentarios sobre rumores o trascendidos”. ¿Cuáles serían esas versiones o trascendidos? Que el HSBC podría estar escuchando ofertas también sobre el negocio argentino. Es un banco que podría tener un valor de mercado de entre 1.000 y 1.500 millones de dólares. En el sistema financiero local, la entidad ocupa el 8 lugar por depósitos y préstamos, y tenía activos por $ 49.933 millones a diciembre.
El propio CEO local del HSBC, Gabriel Martino, escuchó propuestas de “charlar”, que fueron diplomáticamente rechazadas. “No hay nada que hablar, porque el banco no está en venta”, habría sido la fórmula utilizada por Martino.
Para los analistas, no “cierra” tener una pata en el país si falta la pata brasileña. Pero es cierto que el banco pierde plata en Brasil (US$ 306 millones el año pasado) pero gana en la Argentina ($ 562,5 millones). Aunque esas ganancias, como se sabe, no pueden ser giradas a la casa matriz en dólares. Y, además, está el tema electoral, y cierto consenso en que el negocio financiero, como la economía en general, debería tender a recuperarse a partir del año que viene.
Fuentes del mercado consideran que al HSBC se le haría muy difícil, si esa fuera la intención, retirarse de la Argentina: “Imposible que el Banco Central permita una venta sin que los dólares de la operación ingresen al país, e inadmisible para el HSBC no cobrar en Londres, o en el lugar que disponga.
Volviendo a Brasil, el WSJ informó que el proceso de venta se encuentra en una etapa temprana y que podría haber más ofertas. HSBC ya había avisado en mayo que estaba explorando opciones. El HSBC es el séptimo banco más grande de Brasil, con 2,7% del mercado por activos. Si sale de Brasil, su presencia se restringiría a México, Argentina, Uruguay y banca mayorista en Chile.