Lifschitz reconoció que «es necesaria» una reforma constitucional y dijo que va a pedir el desembarco de 3 mil agentes de Gendarmería de forma permanente. Coincidió con Bonfatti en reimpulsar el Puerto de la Música pero lo supeditó a las «posibilidades económicas».
Nada parece sobresaltarlo a Miguel Lifschitz. Mantiene su estilo calmo, lineal incluso en sus modos y tono al hablar. Elige los adverbios para acentuar sus posiciones, cuida mucho sus palabras y pocas veces es tajante. Ni siquiera el hecho de haberse convertido en el futuro gobernador por un margen tan históricamente exiguo lo altera. El senador nunca pierde la compostura, o al menos así intenta mostrarse. En diálogo con Rosario/12, fiel a su estilo, el reemplazante de Antonio Bonfatti adelantó una mirada sobre su futura gestión. Lifschitz reconoció que «es necesaria» una reforma constitucional, dijo que le va a pedir al gobierno nacional el desembarco de 3 mil agentes de Gendarmería de forma permanente y admitió que el Ministerio de Seguridad requiere un cambio de conducción. Realzó la gestión del actual mandatario y destacó que será una «gran ventaja» para él que Bonfatti «presida la Cámara de Diputados».
– ¿Cómo y por qué remontó la ventaja que había alcanzado el Pro en las PASO?
Cuando terminaron las primarias, todo el mundo nos decía que había que leer el resultado y de hecho lo hicimos. Creo que los que no lo hicieron fueron nuestros adversarios, sobre todo el PRO que siguió con una campaña monocorde como si nada hubiera ocurrido y nosotros sí leímos el resultado, que obviamente no fue el que esperábamos. Entendimos que era indispensable reunificar las filas del Frente Progresista, que la única chance de ganar estas elecciones era reteniendo los votos del Frente tanto en la ciudad de Rosario como a nivel provincial. Nos abocamos a esa tarea y se logró, no solo con el esfuerzo sino también con la predisposición de quienes habían sido nuestros adversarios en la interna del Frente, en el caso de Rosario, Pablo Javkin y María Eugenia Schmuck, y en el caso de Santa Fe Mario Barletta y José Corral. Esto fue muy importante porque la base de nuestra elección es las generales fue fundamentalmente haber retenido el voto del Frente. En ciudad de Santa Fe, por ejemplo, habíamos sacado 61 mil votos sumados los míos más los de Barletta en las primarias y sacamos 61 mil votos en las generales. Ese fue el primer secreto. Y, también la primaria movió la estantería, demostró que no la teníamos fácil tal vez como algunos pensaban y puso en movimiento toda la estructura del Frente. El Frente salió fortalecido porque hubo una gran movilización de los militantes, los dirigentes locales, los presidentes comunales, los senadores. Todo eso dio sus frutos en un escenario evidentemente difícil para nosotros porque habíamos tenido una primaria complicada, con cuestionamientos no solo de nuestros opositores sino también de los medios nacionales, muy fuerte y durante bastante tiempo, y además porque competíamos con dos candidatos que tenían fuertes apoyos nacionales a diferencia nuestra, (Miguel) Del Sel con (Mauricio) Macri y (Omar) Perotti con el gobierno nacional y (Daniel) Scioli. En ese escenario hicimos una muy buena elección.
– Del Sel reconoció la derrota, pero su candidato a vicegobernador Jorge Boasso sigue hablando de ilegitimidad, ¿qué opinión le merece?
Lo del Pro y el propio Del Sel fue racional, yo entiendo haber sostenido la discusión hasta que se cerrara el escrutinio definitivo porque en una diferencia tan escasa puede existir naturalmente la expectativa de que se pudiera haber cambiado esa situación. Pero me parece que una vez resuelto el escrutinio definitivo, que además se hizo con absoluta transparencia y dándole oportunidad a los fiscales del Pro que objetaran todas las urnas y recontando los votos, o sea que todas las dudad que pudo haber habido de buena fe fueron subsanadas. Lo de Boasso es inexplicable porque no hay ningún argumento político ni jurídico ni técnico como para seguir sosteniendo que el resultado pudiera ser otro.
– ¿Y el comunicado de las fundaciones que hablaron de «clima enrarecido» y pidieron recuento total de votos?
Me pareció desafortunado, impropio de esas instituciones, sobre todo algunas que incluso no tienen incumbencia para abordar temas políticos, y fuera de contexto, porque si hubiera sido el día del escrutinio provisorio, pero ya cuando se había cerrado el proceso salir con eso, me pareció…bueno, evidentemente algún grupo de dirigentes de esas instituciones las han utilizado para dar una posición política partidaria.
– A diferencia de la actualidad, el Frente Progresista va a tener mayoría en Diputados, ¿cómo imagina su relación con Bonfatti, quién será la figura más fuerte de la Cámara?
A pesar de la diferencia exigua en cantidad de votos, tenemos una fortaleza como coalición política muy importante. Vamos a tener una mayoría clara en la Cámara de Diputados, vamos a tener una presencia importante en la Cámara de Senadores con ocho legisladores, seguimos manteniendo el gobierno de las dos ciudades más importantes de la provincia, más de 170 comunas y municipios de todo el interior, hemos ganado en ciudades muy importantes como Villa Gobernador Gálvez por ejemplo, así que tenemos un peso político fuerte, más allá de la diferencia de los votos, como para garantizar la gobernabilidad. Para mí es una oportunidad que Antonio presida la Cámara porque es tener al frente de la Legislatura a alguien que conoce muy bien la gestión, con el que tenemos, además de una relación personal, sintonía de objetivos, de proyectos. Me parece que va a ser para mí una gran ventaja.
– ¿Por qué Bonfatti sacó casi 200 mil vos más que los tres principales candidatos a gobernador?
La Boleta Unica por categorías despega las elecciones, son en realidad elecciones distintas, no hay vinculación directa entre una candidatura y la otra, pero finalmente cada elección es distinta. Objetivamente, Diputados era una categoría donde la distancia entre Antonio y el resto de los candidatos, por nivel de conocimiento, imagen y todos los motivos que uno pueda imaginarse, era muy grande, y creo que ha sido también un reconocimiento a la gestión. Antonio es la cara visible de la gestión y el fuerte respaldo que tuvo también tiene que ver con una valoración positiva de la gestión provincial.
– A lo largo de sus campañas, los dirigentes derrotados en la interna del Frente le pidieron al socialismo que escuche más, que sea más propenso a consensuar, ¿se perdió ese rasgo?
Como todas las cosas, como las relaciones de pareja, requieren de esfuerzo y voluntades compartidas. Es probable que haya una necesidad, una demanda de mayor apertura, integración. También nosotros hemos requerido mayor compromiso de los dirigentes del Frente con las gestiones de gobierno. Pero me parece que esto en la campaña se fue resolviendo en esta última etapa. Nosotros valoramos muy positivamente el compromiso de Pablo y María Eugenia, se pusieron la campaña al hombro, de la misma forma lo hizo José Corral en Santa Fe y ocurrió también en el interior, en muchos ligares donde había habido internas. Rápidamente se ordenaron las filas, esto abre una buena oportunidad para el futuro, ya lo venía diciendo desde antes que mi objetivo es hacer un gobierno frentista, donde todos los partidos se sientan representados, obviamente en proporción al peso político de cada uno. También vamos a procurar un gabinete con representaciones territoriales porque como siempre los gobernadores son de Rosario o Santa Fe, naturalmente los ministros son más de esas dos localidades y el resto de la provincia siempre dice «Che, ¿a nosotros cuando nos toca?», los del norte, el sur, Rafaela, vamos a procurar una integración de referentes del interior. Y obviamente vamos a buscar una renovación generacional, de sumar figuras más jóvenes en los equipos de gobierno.
– En ese sentido, el radicalismo, partido con un peso político importante en el Frente, ¿tendrá mayor protagonismo en su gabinete?
Eso lo vamos a conversar, es verdad que en el gabinete provincial hay una proporción mayor de socialistas que radicales. También es cierto que en otros ámbitos ocurre a la inversa, por ejemplo en el Senado, donde estoy actualmente, somos ocho y son siete radicales y yo. Ahora va a cambiar, vamos a ser seis y dos, porque nuestro candidato del socialismo ganó en el Departamento La Capital. Son los temas que vamos a conversar y procurar coincidir, que todos los partidos se sientan de alguna manera conformes con su participación en el gobierno.
– El ministro de Seguridad Raúl Lamberto deslizó que piensa dar un paso al costado, ¿necesita otra impronta la cartera que conduce?
Creo que la gestión del gobernador Antonio Bonfatti es una muy buena gestión, esto ha tenido un reflejo electoral y su equipo de gobierno es un buen equipo de gobierno. Obviamente, cada etapa tiene sus desafíos y creo que es necesario un recambio, y en muchos casos aprovechar la experiencia de la gente que ya está, hay que lograr un mix. Va a ser una tarea a la que vamos a dedicar un tiempo bastante prolongado seguramente en los próximos meses, pero…
– Entonces, ¿Seguridad requiere un recambio?
Creo que sí, sí. Pero no por las cualidades, ya lo hemos conversado, de Raúl, que le ha puesto el cuerpo, tuvo que agarrar esa función en un momento de emergencia, la verdad que ha atravesado el tiempo más difícil de ese ministerio. Lo ha hecho bien y ha encarado cambios muy importantes, pero indudablemente la etapa que viene también requiere de nuevos equipos y de darle otro impulso a la gestión. Probablemente eso ocurra en muchas áreas.
– ¿El radicalismo podría quedarse con el ministerio?
No lo hemos conversado, no hemos entrado en ningún debate sobre de ministerio, incluso de común acuerdo lo dejamos para después del proceso electoral. Será una charla que iniciaremos en las próximas semanas.
– Hay obras de envergadura en marcha, como por ejemplo hospitales y acueductos, ¿van a tener continuidad?
Sí, todas las obras en marcha van a tener continuidad, se van a terminar seguramente. Iremos marcando prioridades, algunas son más urgentes que otras, el edificio de la Justicia Penal es muy, muy importante, porque le va a permitir tener un espacio de trabajo que hoy no tiene.
– Prometió la generación de 200 mil empleos en cuatro años, ¿cómo lo piensa lograr?
Ahí vamos a hacer una gestión innovadora, bastante inédita, con programas muy integrales de apoyo, primero al valor agregado de origen de nuestra producción agropecuaria en todo el territorio de la provincia, allí hay una gran potencialidad, ya hay muchos proyectos en marcha, por ejemplo la construcción de molinos harineros a partir de la asociación de pequeños y medianos productores para producir harina y pastas. Todo esto genera trabajo y valor agregado a la producción agropecuaria. Tenemos allí una gran potencialidad en todo el territorio, vamos a apoyar el desarrollo industrial, sobre todo de pequeñas empresas, le vamos a dar un fuerte impulso al turismo a través de mecanismos de financiamiento, promoción, de asistencia técnica. También le vamos a dar un fuerte impulso a la economía social, que tiene un desarrollo importante en Santa Fe y es una variante de la actividad que genera muchos puestos de trabajo, de autoempleo, cooperativas de trabajo. Vamos a abrir un abanico importante de actividades para generar empleo. Por otro lado, la inversión en obra pública y vivienda, a la que también le vamos a dar mucha prioridad y generan muchos puesto de trabajo.
– ¿Va a lanzar planes de vivienda?
Sí, sí, vamos a seguir la línea que siguió Antonio Bonfatti de promover desde la provincia programas más activos de vivienda y de acceso a la tierra, planes materiales, financiamiento para la compra de vivienda, distintas operativas. Vamos a darle más presupuesto a esas operativas y también vamos a intentar que el gobierno nacional colabore un poco más en todo lo que es el financiamiento de vivienda.
– Se mencionó varias veces la palabra ballotage después de las elecciones, ¿la provincia necesita una reforma electoral?
No soy partidario de hacer reformas electorales y menos en caliente. A los sistemas electorales hay que dejarlos tranquilos, no tanto cambio, tenemos un buen sistema electoral en Santa Fe, muy transparente, que le da mucha autonomía al votante, que no nos beneficia a nosotros como oficialistas, pero son sistemas que ponen en un pie de igualdad a los que están en el gobierno con la oposición, le abren más posibilidades a los partidos más pequeños, la Boleta Única, el financiamiento público de las campañas. El tema del ballotage se puede analizar, pero también puede darse en ballotage una elección que se defina por mil votos. Puede ser un debate, no me parece mal, pero habría que pensarlo en el marco de una reforma política, de la constitución.
– ¿Es necesaria una reforma constitucional?
Me parece que sí, es necesaria, probablemente en la Legislatura nueva haya posibilidades de pensarlo. Lo vamos a empezar a conversar después del 10 de diciembre.
– ¿Va a gestionar la presencia permanente de Gendarmería en la provincia?
Sí, totalmente. Es más, voy a requerir más presencia de Gendarmería.
– ¿Mayor cantidad?
Sí, y de manera permanente y no como una dádiva del gobierno, sino como una tarea permanente de Gendarmería porque tiene 40 mil efectivos en todo el país, si pensamos que Santa Fe representa el 8 por ciento de la Argentina tendríamos que hablar de 3 mil efectivos en Santa Fe, por lo menos. Somos una provincia, por su condición geográfica, muy vulnerable a ciertos fenómenos, sobre todo el narcotráfico, el lavado de dinero y el tráfico de armas, que son delitos federales y requieren la presencia de fuerzas de seguridad nacionales.
– En el acto del 20 de junio, la presidenta les habló a los partidos de «raigambre popular», en lo que pareció un mensaje de acercamiento al socialismo, ¿es descabellado pensar en una cercanía política entre ambos partidos?
Bueno, de hecho en algunos temas hemos acompañado todos estos años, acompañamos en la posición con los fondos buitres, lo acompañamos en la estatización de YPF, en las AFJP, en la Ley de Medios, en varios temas que sentimos eran ideas y proyectos que nosotros compartíamos ideológicamente y seguramente lo haremos en el futuro si es que siguen siendo gobierno. Pero también tenemos profundas diferencias en otras.
– El gobernador reflotó la creación del Puerto de la Música, ¿usted lo tiene entre sus prioridades?
Es un proyecto que me interesa desde luego porque creo que es un proyecto emblemático para la ciudad, no solo para la cultura, es de esos proyectos que son como hitos urbanos para las ciudades, pero también sé que hay prioridades, muchas obras en marcha que hay que concluir, que hay demandas sociales en materia de infraestructura muy importantes que necesitamos darle respuesta. Vamos a poner esa obra, que es importante, en el marco de las posibilidades económicas, presupuestarias, de las prioridades y desde luego que, si pudiera concretarla, sería para mí muy importante.