Fue anoche, luego de 24 allanamientos en donde se detuvo a un grupo de personas vinculados a la violencia y el negocio narco. Uno de ellos es «El Cone», sindicado como autor del crimen de «Pandu» Ojeda, a mediados de marzo en las afueras de la disco.
Una investigación muy importante que comenzó el año pasado con una saga de hechos violentos y muertes en barrio La Ranita del noroeste santafesino culminó este viernes por la noche con 24 allanamientos ordenados por la Unidad Especial de Delitos Complejos del MPA y dirigidos por la fiscal Laura Urquiza. La causa, en donde se entrecruzan crímenes, amenazas, vendettas y negocio narco barrial, tuvo un importante avance con la detención en un club de Santo Tomé de un grupo de personas que festejaban un cumpleaños en el lugar llamado «Punto de Encuentro».
Entre los detenidos está un joven apuntado como co autor del crimen de Joaquín «Pandu» Ojeda, ocurrido a medidos de marzo de este año en las afueras del boliche La Loca, ubicado a pocos pasos del Puerto local, en pleno barrio residencial de Candioti. Se trata del conocido como «Cone», quien esperará hasta el próximo martes para que le lean los elementos de cargos en su contra en una audiencia imputativa que encabezará Urquiza.
Los allanamientos permitieron secuestrar elementos de interés para la causa y detener a más personas, aunque dos de los laderos del Cone siguen prófugos, uno de ellos es su hermano, cobre quien ya pesaba un pedido de captura desde el año pasado, aunque se lo veía en espacios públicos de Santo Tomé y el sur de la ciudad capital sin mayores contratiempos. También es buscada la pareja de «Cone», una joven integrante de la familia Bergallo, del norte de la ciudad, relacionada a la venta de drogas.
La banda de «Cone» habría protagonizado hechos muy violentos y muertes, además de que hay sospechas suficientes que indican una participación fuerte en el negocio narco barrial, de hecho, de acuerdo a la pesquisa y varias fuentes consultadas, sus enemigos en la zona responden a Claudio «Pulga» Casco, otro conocido narco con presencia fuerte en Laguna Paiva, La Tablada y Nuevo Horizonte y fuertes lazos con sectores policiales. Casco y su pareja, Lorena Melgarejo se encuentran prófugos de la justicia federal desde hace dos años, con pedido de captura internacional, aunque cada tanto se burlan de esa situación, cada vez que visitan los barrios del norte, incluso Melgarejo llegó a visitar una efector local de salud en plena pandemia de Covid, registrándose con con propio nombre.
