Las medidas fueron pedidas por un fiscal diamantino, que investiga el homicidio del ex jefe de la barra brava de patronato. “Petaco” fue ejecutado en febrero pasado en Colonia Ensayo, provincia de Entre Ríos, por un grupo que actuó fuertemente armado. ¿Hasta dónde llega la pista local?
Por pedido del fiscal de Diamante Gilberto Robledo (Entre Ríos) y con las órdenes de allanamientos firmadas por el juez santafesino Jorge Patrizi, la Brigada de Homicidios de la policía entrerriana en colaboración con el departamento de Causas Complejas de la AIC, allanaron este miércoles, desde las primeras horas del día, 8 domicilios en Santa Fe y requisaron una celda en la Alcaidía de la Cárcel de las Flores.
La pesquisa llevó a Robledo hasta la capital santafesina en búsqueda de un hombre de 40 años que actualmente está preso en el Pabellón 1, Módulo C de la Alcaidía de Las Flores, identificado como Orlando Damián G. aposado “Chanchi”, ingresado en marzo pasado por varios delitos relacionados a la privación de la libertad. Los investigadores creyeron ubicarlo en su domicilio de Lavaisse y Pje. Paraguay, donde convivía con Jésica Guadalupe P. , de 35 años. Allí sí encontraron 841 gramos de cocaína, una balanza, 2 celulares, 61 .000 pesos y una tarjeta de memoria. La mujer quedó detenida a disposición del juzgado federal 2 de Santa Fe.
Los investigadores creen que en el domicilio de “Chanchi” se refugiaban alternativamente dos hombres que habrían tenido que ver con el crimen de Barrientos el 18 de febrero pasado en una casa quinta del paraje turístico llamado Colonia Ensayo, donde estaba temporalmente visitando a su pareja en una salida transitoria otorgada por el Servicio Penitenciario de Entre Ríos. Colonia Ensayo, ubicada a pocos minutos de Paraná, tiene jurisdicción en el departamento Diamante. Es un lugar atractivo para la pesca ya que tiene un brazo del Paraná que conecta directo con el canal principal del río del mismo nombre. En varias ocasiones se observaron movimientos de lanchas y grandes camionetas moviendo bultos hacia ambas orillas. “Petaco” fue ejecutado un mediodía en el marco de una salida que lo habilitaba estar con sus parejas algunas horas.
Entre las hipótesis que surgieron inmediatamente conocida la noticia hubo una que resumía la envergadura del crimen: una venganza financiada con apoyo de la inteligencia estatal: el grupo ingresó armado, vestidos de policías y con el dato que ése día iba a estar “Petaco”, algo que debió cuidar celosamente el Servicio Penitenciario. Con otro detalle: todas las balas fueron para el ex hombre fuerte del club de calle Grella. Su mujer resultó ilesa en el concierto de balas.
Allí se habló rápidamente de la posibilidad del ajuste narco, actividad que también le permitió a Barrientos expandir sus negocios en la capital entrerriana por los menos durante una década.
La Fiscalía sigue la pista de dos santafesinos – familiares entre sí -que durante muchos años vivieron en Paraná y crecieron patrimonialmente en base a grandes atracos y la provisión de insumos para fabricar drogas, de acuerdo a lo informado por fuentes policiales. “Cepillo” y “Josi” estuvieron en lo más alto de la consideración del hampa paranaense hasta el 16 de noviembre del 2020 cuando en plena pandemia fueron asesinadas tres personas en el barrio Las Camelias de Paraná, las víctimas fueron identificadas como Laureano Morales (20), Germán Herlein; y Cristian Barreto (43). Un cuarto se salvó de milagro.
Algunas miradas apuntaron a “Cepillo”, quien volvió a sus orígenes en Santa Fe, en el barrio San José y rápidamente tomo contacto con gente del ambiente, con o sin uniforme. “Josi” – llamado José A. – era el que me mayor presencia tenía en Santa Fe y cada tanto, cuando el clima se ponía denso se refugiaba en un chalet en San Clemente, cerca del mar.
A “Josi”, a quien buscaban los pesquisas diamantinos – junto con Juan Carlos M. – era frecuente verlo en el barrio San José, algunas veces – afirman investigadores federales- junto a Oscar “el Gordo Lechuga” Gómez, un narco que hace poco fue nuevamente detenido por agentes antinarcóticos de la AIC cerca de la ciudad de Recreo.
Los detectives de la Brigada de Homicidios llegaron a Santa Fe buscando a dos hombres claves, y aspiraban hacerlo en los 8 lugares a requisar, aunque los resultados no fueron los esperados. Zona Crítica intentó comunicarse con la Fiscalía, pero no obtuvo respuestas.
H.M.G