En la tercera jornada del juicio que se lleva a adelante al ex jefe de la Policía santafesina, Hugo Tognoli, se destacaron los testigos hábiles a la hora de declarar, otros que se escudaron en tecnicismos y algunos olvidadizos. En todos los casos, la principal figura fue el Fiscal General Martín Suárez, que se ganó un par de retos del tribunal, sobre todo de su presidente Jose Escobar Cello, por insistidor.
El primer declarante de la mañana fue el bioquímico Néstor Pozzi, ex encargado de peritar todo el material secuestrado en los procedimientos durante el lapso de la gestión de Tognoli que se investiga (2009 a 2012). Pozzi se escudó en relatos técnicos sobre cómo se audita la droga incautada en los allanamientos, se lamentó de no tener aparatología de avanzada para hacerlo y responsabilizó a la actual Secretaria de Delitos Complejos, Ana Viglione, de poner trabas para adquirir equipamiento de primer nivel. La queja estuvo motivada en que el peritaje de Drogas Peligrosas fue disímil al de Gendarmeria, pedido por la defensa del narco regional Daniel Francisco Mendoza, también sentado en el banquillo de los acusados, imputado por fabricación y comercialización de cocaína y por amenazar a Norma Castaño con difundir un video de ellos dos hablando en la vía pública, en la que también están involucrados el comisario José Luis Baella y Mauricio Otaduy (otro ex integrante de la Seccion Inteligencia de Drogas Peligrosas), además de Tognolli. Para la Gendarmería, el 8% de la sustancia blanca incautada a Mendoza era cocaína. Pozzi, se tomó su tiempo además para distinguir «fabricación de drogas» y «producción de drogas». Calificó a la primera como la que supone la plantación de la hoja hasta la transformación en clorhidrato de cocaína. La segunda opción, en cambio, es la mezcla, ordinariamente conocida como de estiramiento.
Otro de los testigos relevantes de la jornada fue el oficial José Hugo Rojo, de 51 años, quien actualmente se desempeña en la Seccional 7ma de la ciudad de Santa Fe. Rojo, que estuvo en Inteligencia de Drogas varios años, contó que tiene «resentimiento, odio y bronca» hacia Norma Castaño porque se cansó de decir «barbaridades» de mí en la radio y por eso le envié una carta documento en marzo de 2011, que no contestó nunca. En otro tramo de su exposición Rojo señalo a Baella y a (Carlos «Chino») Pagano como sus jefes directos en Drogas, «a ellos le reportábamos todo».
Más tarde fue el turno de tres gendarmes que se desempeñaron en la ciudad de Santa Fe en 2011 y 2012 pero que hoy tienen otros destinos.
Daniel Sosa, Jael Jesús Paez y Roque Niz detallaron sus intervenciones en las investigaciones. A Paéz, por ejemplo, le encomendaron en su momento la tarea de seguir los pasos de Mendoza en su casa de Colastiné y concluyo en su informe de inteligencia que «no se habían detectado movimientos que hagan pensar que se comercialice drogas en esa vivienda»
Por la tarde pudo escucharse al ex compinche de Baella en la Sección Inteligencia de Drogas Marcelo Cocco, quien acompañó a Baella hasta la casa de Mendoza en un Corsa de la repartición el sábado 3 de marzo de 2012 en horas de la noche y se entrevistaron con el narco investigado, al que hicieron subir al auto de la dependencia, según e informe de dos agentes de Asuntos Internos que siguieron la maniobra ese mismo día y luego plasmaron el relato en una denuncia en la Fiscalía Federal. Cocco negó varias veces que éso haya sucedido y el fiscal insistió hasta escuchar el apercibimiento del Presidente del Tribunal, Escobar Cello. Dijo que sí se subió al auto con Baella, que estuvieron en la zona de la costa pero se debió » a una recorrida por la ciudad con fines investigativos». Cocco, que actualmente se desempeña en la Sección Inteligencia del D2 (Departamento de Informaciones) de a Policía provincial dijo que, tanto Baella como él regresaron ése sábado por la noche a la repartición como a las 23.30 para luego dirigirse a una «pueblada» que se estaba generando en la localidad de Ángel Gallardo por una queja de vecinos por la presencia de vendedores de drogas. Según Cocco, el Jefe (Tognoli) les pidió que se hagan cargo de la situación y fueron hasta el lugar. El Fiscal General Martín Suárez Faisal preguntó: ¿Cómo puede ser que dos personas que tienen tareas de incógnito y de investigación vayan a una reunión pública?. – «Yo no bajé del auto doctor, sólo bajo Baella», dijo Cocco.
Finalmente preguntó Escobar Cello: ¿Y dónde fue la reunión, en la Comisaría, en un lugar público?. – Creo que en la Comisaría, bajó Baella que al regresar me dijo que había una reunión el lunes.
-Ah, ¿entonces se hizo esa reunión el sábado?, dijo el Presidente.
-Si.
-Lo que es seguro es que yo no estuve, bromeó Escobar Cello, pero nadie sonrió. Todo el clima estaba tenso.
Suárez Faisal pidió que se deje constancia del testimonio de Cocco, sobre todo en la parte donde niega haberse encontrado con Mendoza en la casa del «Tuerto» el 3 de marzo de 2012, como aseguran dos agentes de Asuntos Internos que aún no declararon.
Autor: Héctor Galiano.