El Tribunal Oral Federal dictó hoy sentencia contra el agente Ángel Atilio Dallia, detenido el 30 de mayo de 2015. El acusado dijo que “esto fue una cuestión política”.
Seis años de prisión de cumplimiento efectivo fue la condena que el Tribunal Oral Federal de Santa Fe le impuso hoy al policía Ángel Atilio Dallia, considerado autor responsable por el delito de “tenencia de estupefaciente con fines de comercialización, agravado por su condición de funcionario público encargado de la prevención o persecución de los delitos” vinculados al tráfico de drogas.
El juicio oral y público comenzó ayer y estuvo a cargo de los jueces María Ivón Vella, José María Escobar Cello y Luciano Homero Lauría, quienes esta mañana se expidieron en forma unánime y de acuerdo a la calificación y pena solicitada por el fiscal general Martín Suárez Faisal en su alegato.
Dallia fue detenido el 30 de mayo de 2015 en una casa ubicada en terrenos del ferrocarril, sobre la avenida presidente Néstor Kirchner de Laguna Paiva. El allanamiento, en el que se secuestraron 49 gramos de cocaína fraccionados en 85 envoltorios listos para la venta, estuvo a cargo de personal de la Policía Federal Argentina, a instancias del Juzgado Federal Nº2 del Dr. Francisco Miño.
Entre otros elementos de prueba, surge el secuestro de una balanza de precisión; cinco armas de fuego -3 escopetas, una carabina y un revólver-; y una credencial y chaleco antibalas de la policía de Santa Fe.
La denuncia
La actuación policial-judicial fue el resultado de una denuncia presentada el 1º de octubre de 2014 por el intendente de la ciudad, Rodrigo Martín Fernández, quien declaró en el juicio bajo la figura de testigo de identidad reservada, aunque es de público conocimiento su compromiso y actuación en pos de erradicar a los vendedores de drogas de su ciudad.
El intendente Fernández fue uno de los 9 testigos que participó ayer en el debate, ratificando la acusación contra el preso que, aunque se declaró inocente, en ningún momento mostró signos de arrepentimiento por su accionar delictivo.
“Esto fue una cuestión política donde el más débil fue perjudicado, y en este caso el más débil fui yo”, repitió Dallia con la voz entrecortada por las lágrimas. El acusado tuvo esta mañana la posibilidad de dar sus últimas palabras antes del dictado de la sentencia y aprovechó para decir que “soy una persona humilde y de trabajo”, “soy padre de 8 hijos” que “me necesitan”; y “nunca tuve necesidad de hacer algo de lo que me están acusando en este momento”.
En actividad
El tribunal lo escuchó en silencio y tras un cuarto intermedio dio a conocer la sentencia condenatoria que devuelve al reo al Complejo Penitenciario Nº11 de Piñero donde se encuentra alojado.
Por otra parte, los jueces rechazaron las nulidades planteadas por la defensa técnica; asimismo dispusieron remitir la credencial y chapa de policía a nombre de Dallia a la Jefatura de Policía; y fijaron para el próximo miércoles 6 de abril a las 12.30 la lectura de los fundamentos.
Al momento de ser detenido Dallia ostentaba el rol de funcionario policial, con prestación de servicios en la Unidad Regional II de Rosario y previamente al ingreso a la fuerza -1º de septiembre de 2009-, se desempeñó como agente penitenciario. Cuatro días después de su detención -3 de junio de 2015- fue pasado a “disponibilidad”, según información suministrada por el Departamento de Personal de la Policía y agregada a la causa.
“Es un dato muy positivo”
El intendente de Laguna Paiva, Rodrigo Fernández, se mostró satisfecho con la sentencia conocida esta mañana. “Me pone contento que lo hayan condenado”, dijo el funcionario público que denunció la venta de estupefacientes en octubre de 2014.
“Ayer me tomaron declaración como testigo encubierto” y aunque “todo el mundo sabe que el que denunció fui yo, porque se hizo público”, durante la declaración “la abogada de Dallia me llamaba por mi nombre”.
En cuanto a la resolución del caso “para nosotros es muy importante en la medida que es la finalización de una investigación de una actividad que era muy nociva”. A su vez, destacó que “estamos a la espera de otros procesos, que también se hicieron con resultado positivo en la ciudad, que de alguna manera eran espacios de venta que crecieron a partir de la caída de Dallia”.
Por último destacó que “vemos que la persecución a la venta se ha notado y ha dado resultado positivo, más allá de que van cambiando las formas de comercialización, se trabaja más bajo la modalidad delivery o vienen a comprar a Santa Fe”; y “si bien sabemos que la condena a Dallia no pone fin al flagelo, es un dato muy positivo”, cerró.