Ayer a las 17 hubo un enfrentamiento a tiros sobre un colectivo que dejó un herido. Los choferes suspendieron el servicio por 12 horas y retomaron hoy a las 6, bajo promesa de acompañamiento policial.
En los últimos cuatro días, dos enfrentamientos armados en las calles de Alto Verde tuvieron por protagonistas a colectivos de la Línea 13. El miércoles, a las 22, una bala impactó contra el parabrisas de un coche y ayer, por primera vez, hubo una balacera dentro de un colectivo.
El suceso motivó un paro de 12 horas hasta que hoy a las 6 se normalizó bajo la promesa de una custodia policial. “Por seguridad de los choferes y los pasajeros, sin custodia no brindaremos el servicio” comentó Gustavo Torres, delegado de los choferes de la línea, que administra Autobuses Santa Fe. El delegado de la UTA, Miguel Arce, coincidió en que “sin custodia no habrá colectivos” y reforzó el pedido de los choferes. Ambos sostuvieron que la policía prometió una camioneta policial que acompañe a los colectivos por las calles del distrito en inmediaciones de la Manzana 2, uno de los puntos neurálgicos de violencia en el barrio.
Sin embargo, esta mañana El Litoral estuvo en Alto Verde y constató que los coches de la mañana circularon sin custodia. Hoy, se respetó la frecuencia normal: tres coches, de 35 minutos, y uno para el servicio diferencial del paraje La Boca.
Aunque los tiros son muy frecuentes en este barrio costero, “es la primera vez que nos pasa algo así: un tiroteo arriba del colectivo, con gente y chofer a bordo; no fue un robo, fue un enfrentamiento”, contó Torres.
Balas en el colectivo
Fue ayer a las 17, cuando un colectivo de la línea ingresaba al barrio. En inmediaciones de la Plaza de la Paz, ubicada en la Manzana 2, un joven subió al coche para escapar de una lucha entre bandas y fue perseguido por un grupo que subió al colectivo y emprendió una lucha con golpes y tiros. El coche no tenía botón de pánico. “El chofer abrió las puertas y se bajó junto con la gente, que escapó como pudo”, contó el delegado. El coche quedó parado junto a la plaza y al verlo detenido otro colectivo de la línea se detuvo a su lado. Al percatar la situación, los pasajeros se tiraron al suelo y el chofer accionó el botón de pánico.
El saldo de la tarde fue un herido de bala que escapó del lugar luego del ataque y un paro de los choferes de Línea 13 que duró unas 14 horas. “Los vecinos se solidarizaron con nosotros, nos entienden porque saben que la medida fue por algo grave”, contó el delegado de los choferes. La ausencia de coches fue suplantada por tres camionetas de la Guardia de Seguridad Institucional (GSI) del municipio, que trasladó a los vecinos de Alto Verde desde el interior del barrio hasta el Puente Carretero.
Fue la segunda vez que las balas alcanzan a los colectivos: el miércoles, una bala impactó en el parabrisas de un coche de la Línea 13. El portal de Facebook Alto Verde Noticias, que reúne las novedades del barrio, detalló que “el chofer hizo una maniobra brusca que casi provoca un choque contra una vivienda. No tienen respuesta ni de la Policía ni desde la Secretaría de Transporte. Al igual que muchos en el barrio tienen miedo de circular, de prestar el servicio”. Al relato lo respaldaron los hechos: hoy no se presentó a trabajar el chofer que ayer conducía el colectivo que fue escenario del conflicto.
Sirenas
Por la noche siguieron las sirenas: una dotación de bomberos sofocó el incendio de una vivienda precaria, en la Manzana 6.
Referentes de la Red Interinstitucional y Social del barrio plantearon esta mañana su preocupación por la violencia y el hartazgo de los vecinos. “Ayer, Alto Verde fue un paisaje de guerra: entraron los coches negros de los Grupos de Operaciones Especiales, los autos negros de la policía y la GSI con las camionetas amarillas… hasta el helicóptero vino, vivimos al límite, no sabemos qué hacer”, dijo Hugo Cabrera, referente de la Red como vecino.
Pasajeros en medio de un tiroteo
El tiroteo fue ayer a las 17, en inmediaciones de la Plaza de la Paz, sobre un colectivo de la Línea 13 que quedó parado junto a la plaza. Las imágenes corresponden a otro colectivo que, al verlo, se detuvo a su lado. Al percatarse la situación, los pasajeros se tiraron al suelo y el chofer accionó el botón de pánico
Fuente: El Litoral