Darío Montenegro es médico generalista, tiene 55 años y hace 10 que se desempeña como director del Hospital Protomédico de la ciudad de Recreo, ubicado a la vera de la ruta provincial 5. Este martes, realizaba tareas administrativas en su despacho cuando fue atacado por un violento empleado que lo golpeó, lo insultó y amenazó con matar a sus hijos.
«Yo estaba en la dirección respondiendo correos electrónicos atrasados. Estaba concentrado en la pantalla. En un momento, levanto la vista y encuentro a este hombre que había ingresado sigiloso. Era un empleado de muchos años en el hospital, que actualmente se encuentra de licencia porque tiene graves denuncias en su contra y está siendo investigado. Le pedí explicaciones sobre qué hacía en el lugar y empezó a acusarme, de que por mi culpa se iba a quedar sin trabajo. Entonces comenzó a gritar y le dije que iba a llamar a la guardia policial», recordó el profesional.
«Cuando me levanto de la silla -agregó-, me empuja y caigo debajo del escritorio. Me levanto rápido y me da un golpe de puño arriba del labio superior. Quedé pasmado. No la esperaba».
Montenegro cuenta que a pesar del shock se incorporó y se colocó detrás del agresor. Lo agarró con fuerza y logró sacarlo al pasillo. A los gritos, palabras más o menos, el violento sujeto lanzó una escalofriante amenaza, luego de insultarlo: «Yo se donde vivís, conozco a tus hijos. Los voy a matar y a vos también».
«Me dijo los nombres de mis hijos. Después, cuando ya había llegado la policía, lloraba, decía que se iba a suicidar, pero me aclaró: ‘cuando me suicide me voy a llevar a alguien de los tuyos’. Fue muy enfático con eso. Después, se subió a un auto y desapareció», narró el doctor.
Sumarios
El acusado es un técnico químico con 20 años de antigüedad en el hospital. «Tuvo problemas en todos los lugares por los que pasó. Primero estuvo en farmacia, donde fue sancionado. Lo reubicaron en el laboratorio y pasó algo parecido, al igual que en facturación. Terminó en el sector de carga de datos, donde estaba solo, pero él pidió el traslado y así fue que lo pasaron al centro de salud de Recreo que depende del Protomédico. Allí fue que tuvo un problema con una compañera de trabajo e iniciamos otra actuación sumarial. Por protocolo, lo reubicaron en el Cemafe en 2020, donde volvió a tener un incidente de violencia de género. Lo sancionaron con cinco días de suspensión».
«A la par, recibimos otra denuncia del odontólogo de Recreo contra este hombre, porque arrojaba las herramientas del profesional y también hacía afirmaciones xenófobas», añadió Montenegro.
Preocupación
El director del hospital realizó las denuncias correspondientes en el Ministerio Público de la Acusación y en Fiscalía de Estado. Solicitó medidas restrictivas perimetrales en el hospital y en su domicilio.
«Hay una dilación en el proceso que nos preocupa, porque desde 2019 que esperamos que los responsables se expidan. No sabemos qué va a pasar. Yo no soy ni amigo ni enemigo de él. Desde lo médico, tratamos de ayudarlo, porque necesita ayuda. Lo intentamos, tratamos de que haga terapia. Pero ya está. Hasta acá llegamos», se lamentó el funcionario.