El hecho ocurrió el viernes 13 de este mes en Rodán, donde reside una de las principales testigos en la causa que se lleva adelante contra Esteban Alvarado. Por su destreza y estado físico, pudo salvar su vida.
Mariana Ortigala no olvidará jamás ése día. A las 9 de la mañana quiso subirse a su vehículo en Roldán, departamento Rosario, para iniciar sus actividades. En una camioneta negra llegaron tres personas, Un queda al volante y dos se bajaron a gatillar. Ortigala se va por el lado del acompañante y corre. Un balazo le quema el glúteo, otro el pie y uno más una costilla. Todo quedó registrado en las cámaras de seguridad de la casa de la mujer.
Ella y su hermano son los principales testigos en la causa que tiene preso a Esteban Alvarado y parte de su banda, en el marco de un expediente judicial provincial, iniciado por el asesinato de un prestamista, hace dos años. Alvarado, que hace unos años se dedicaba al robo de autos, estuvo preso un tiempo, pero al recuperar la libertad volvió a Rosario para montar un negocio narco, tal como se ventilaron en causas federales, que estuvieron perezosas un largo tiempo.
En ese marco, Mariana se aprestaba a salir de su casa – en San Pedro y Dulcinea del Toboso – el viernes 13 para buscar a otro testigo clave, al que pensaba presentar a los fiscales para que desarrolle su testimonio que , claro está, perjudicaba a Alvarado. Pero de repente irrumpió la camioneta, que se puso al lado de la mujer, que ya había ingresado al coche, para disparar a mansalva. Ortigala señaló luego , en entrevistas mediáticas, que fueron 35 disparos los ejecutados. Una semana después, en otro hecho muy violento, asesinaron a Rodrigo Sánchez, de 44 años, a quien se señaló como una persona de confianza extrema de Alvarado.
Pesquisas de la AIC al mando del fiscal Matías Edery lograron dar con uno de los posibles autores del hecho contra la testigo. En una audiencia imputativa se le achacó a Francisco «Fran» Riquelme, ser uno de los integrantes de la banda que se bajó de la Citroen Picasso , color negro, y dispararon sin miramientos.
En otras medidas ordenadas por el MPA se detuvieron a la hermana de Alvarado, Yanina, y a un compinche de ambos, tambien integrante de la banda «del Esteban».