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Críticas y cruces políticos en la despedida de los gendarmes

En el acto en Rosario, el funcionario nacional dijo que Binner fue el responsable de que la policía se “autonomizara”. “Fue advertido y miró para otro lado”, aseguró. El ministro de Gobierno santafesino le espetó que “los que festejan son los delincuentes con esas especulaciones políticas”.

La despedida de los dos mil gendarmes de Rosario fue con polémica y cruces políticos. Ya sin cuidar las formas, el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, culpó a Hermes Binner, quien ayer a la tarde lanzó su precandidatura presidencial por el Frente Unen, de ser el responsable de que la policía “se haya autonomizado” y haya sido perforada por la “corrupción”. Al gobernador Antonio Bonfatti lo excluyó de sus cuestionamientos, pero dejó en claro que fue él quien pidió ayuda para enfrentar los problemas de seguridad en Rosario. “Vinimos por 45 días y nos debimos quedar 250. El gobernador pidió prórrogas para que las fuerzas federales no se retiraran. Ahora, terminaron de capacitar a la nueva policía. Por eso, el Operativo Rosario, que demandó una inversión de 250 millones de pesos sólo en viáticos, terminó”, explicó Berni en diálogo con El Litoral, unos minutos después del acto que encabezó en la sede del destacamento móvil Nº 2, donde se formalizó el repliegue de los dos mil efectivos de las fuerzas federales que patrullaron las calles de distintos barrios de Rosario desde el 9 de abril pasado, cuando en un megaoperativo se allanaron de manera simultánea más de 80 búnkeres de venta de drogas.

Berni puso el eje en que el problema de seguridad en esta ciudad “no es el narcotráfico sino el delito común”. “En Rosario, el problema principal no es el narcotráfico sino la violencia del delito. Junto a Santa Fe son las ciudades que casi quintuplican los índices delictivos y de homicidios a nivel país”, apuntó. El arribo de las fuerzas federales a partir del 9 de abril pasado se debió, según lo aseguraron desde el gobierno nacional en ese momento, para enfrentar la lucha contra el narcotráfico. El gobierno santafesino siempre dijo que un delito complejo como el narcotráfico debía ser enfrentado por las fuerzas federales. Ahora, las miradas sobre el tema tanto de parte de la gestión de Bonfatti como del gobierno nacional vuelven a chocar, unos días después de ingresar en 2015, un año que estará marcado por el calendario electoral.

Réplica

El ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Rubén Galassi, quien estuvo presente en el acto en de despedida de los gendarmes, fue el encargado desde el gobierno provincial de salir a responder las críticas del secretario de Seguridad. “Hacer especulaciones políticas para marcar un camino u otro, lejos de ayudar a resolver el problema, provoca que los únicos que festejen con esas declaraciones sean los delincuentes”, apuntó el titular de la cartera de Gobierno, y agregó: “La seguridad es responsabilidad de los distintos niveles de gobierno, así que hacer un planteo partidario, es incorrecto”.

El gobierno provincial deberá enfrentar el desafío de suplir los patrullajes que realizaban en más de 180 patrulleros los efectivos de Gendarmería. La estrategia delineada por esa cartera fue sacar a la calle 750 efectivos de la Policía de Acción Táctica para que cumplan el rol que desplegaban las fuerzas federales en las zonas más calientes. A partir de ahora, quedarán en el destacamento móvil de Gendarmería unos 600 uniformados, que no estarán asignados únicamente a la ciudad.

Para otro lado

Berni acusó al actual diputado provincial y precandidato del Frente Unen de “apostar por la autogestión de la policía, algo que terminó con una fuerza con altos niveles de corrupción. Pero él decidió mirar para otro lado cuando se le advirtió”. Y recordó el caso del ex jefe de la Policía Hugo Tognoli, quien este año va a enfrentar dos juicios por nexos con el narcotráfico. “Hoy Binner está lanzando su campaña presidencial en Mar del Plata y nosotros estamos en Rosario trabajando”, apuntó Berni.

El secretario de Seguridad de la Nación señaló que cuando las fuerzas federales llegaron a Rosario, encontraron “una ciudad con más de 270 homicidios por año, donde no había autoridad en la calle. Hemos logrado lo más difícil en la lucha contra la delincuencia, que es torcer la curva”. Y agregó que “el éxito de la misión está dado en que hoy vuelven a sus hogares los 2 mil efectivos de que participaron del operativo”.

El secretario de Seguridad enumeró que el Ministerio de Seguridad desembolsó 250 mil pesos en viáticos para los efectivos de las fuerzas federales. En los 250 días que duró el “Operativo Rosario” se llevaron adelante 2.168 detenciones y se secuestraron más de 12 mil vehículos. En la Justicia Federal se abrieron 350 causas, muchas de ellas ligadas al narcotráfico.

Berni destacó la creación del destacamento de Inteligencia Criminal más importante del país, donde estarán abocadas las cuatro fuerzas federales Gendarmería, Policía Federal, Policía Seguridad Aeroportuaria y Prefectura. “Es una señal importante en una pelea muy fuerte contra el narcotráfico”, apuntó y advirtió: “Nadie los ve porque son gente entrenada que anda vestida con ropa civil”.

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